Descubre Dinamarca: Consejos sobre conducción, seguridad y cultura
La capital de Dinamarca es Copenhague, una ciudad vibrante conocida por su colorido puerto de Nyhavn, los Jardines de Tivoli y la estatua de La Sirenita.
Los ciudadanos de la UE no necesitan visa. Los ciudadanos de EE.UU., Canadá y Australia pueden visitar hasta 90 días dentro de un período de 180 días sin visa bajo el acuerdo Schengen. Otras nacionalidades deben verificar con el Servicio de Inmigración Danés.
Dinamarca usa la corona danesa (DKK). Aunque es parte de la UE, Dinamarca no ha adoptado el euro. Las tarjetas son ampliamente aceptadas, pero tener algo de DKK es útil para compras pequeñas.
Sí, Dinamarca es uno de los países más seguros del mundo. Los índices de criminalidad son bajos, pero pueden ocurrir robos menores en áreas turísticas como Strøget en Copenhague—mantén tus pertenencias vigiladas.
El idioma oficial es el danés. El inglés es ampliamente hablado, especialmente en áreas turísticas y entre los daneses más jóvenes, lo que facilita la comunicación para los visitantes.
Dinamarca es conocida por su historia vikinga, castillos de cuentos de hadas (como Kronborg), diseño moderno (piensa en LEGO y muebles daneses), y su concepto de "hygge" (acogedor). También es famosa por sus pasteles daneses.
El verano (junio a agosto) es ideal para un clima suave y festivales, aunque es la época más concurrida. La primavera (abril a mayo) y el otoño (septiembre a octubre) ofrecen menos multitudes y un clima agradable.
Dinamarca puede ser costosa, especialmente en Copenhague. Comer, hospedarse y el transporte son caros, pero opciones económicas como albergues y comida callejera (por ejemplo, smørrebrød) pueden ayudar a controlar los gastos.
Sí, el agua del grifo en Dinamarca es limpia y potable—una de las mejores del mundo. Lleva una botella reutilizable para ahorrar dinero y reducir los desechos plásticos.
Los principales sitios incluyen Copenhague (Nyhavn, Tivoli), Aarhus (Museo ARoS), Odense (ciudad natal de Hans Christian Andersen), los Acantilados de Møn y las Islas Feroe por sus impresionantes paisajes.
Dinamarca, una joya escandinava, combina una rica historia con innovación moderna. Copenhague, la capital, encanta con su colorida ribera en Nyhavn, los históricos Jardines de Tivoli y la icónica estatua de La Sirenita. Más allá de la capital, Dinamarca ofrece castillos de cuentos de hadas como Kronborg (el escenario de *Hamlet* de Shakespeare), pueblos encantadores como Odense—lugar de nacimiento de Hans Christian Andersen—y maravillas naturales como los blancos Acantilados de Møn y las ventosas Islas Feroe. Conocida por su herencia vikinga, Dinamarca también destaca en diseño moderno, con marcas reconocidas globalmente como LEGO y muebles daneses minimalistas. El concepto de "hygge"—un enfoque cultural en la calidez y el bienestar—define el estilo de vida danés, evidente en los cafés iluminados con velas y la hospitalidad cálida. La cocina danesa resalta ingredientes frescos y locales, desde smørrebrød (sándwiches abiertos) hasta restaurantes con estrellas Michelin como Noma. Con sus ciudades amigables para las bicicletas, su ética sostenible y alta calidad de vida, Dinamarca es perfecta para viajeros que buscan cultura, naturaleza y un toque de encanto escandinavo.
El Aeropuerto de Copenhague (CPH), ubicado en Kastrup, a 8 km del centro de la ciudad, es el principal centro internacional de Dinamarca, con vuelos a Europa, América del Norte y Asia. Otros aeropuertos como Billund (BLL) y Aarhus (AAR) ofrecen vuelos regionales y de bajo costo.